¿Sabía que las primeras fórmulas de jabón se remontan a la antigua Babilonia? Se trataba de una solución alcalina nada rudimentaria mezclada con agua y aceites de casia. Aunque tendremos que esperar un par de miles de años para toparnos con la icónica pastilla de jabón, y precisamente en la Marsella de finales del siglo XV, los secretos para crear jabón sin recurrir a la producción industrial en masa, han estado disponibles durante milenios.
Aunque las pastillas de jabón pueden utilizarse para todo tipo de limpieza: desde jabón corporal hasta champú y detergente en general. En tiempos más recientes, el jabón en pastilla se ha utilizado mucho para lavarse las manos con regularidad.
Puede parecer sorprendente, pero es posible fabricar pastillas de jabón de manos en casa con sólo dos ingredientes. Y tendrán el mismo aspecto, tacto y propiedades limpiadoras que las pastillas de jabón de marca.
Sigue esto paso a paso guía para crear pastillas de jabón perfectas, ¡y recuerda darle tu propio toque creativo!

Ingredientes
Paso 1 - Picar y fundir la base de jabón
Puede hacerlo mediante dos métodos diferentes: calentando la base de jabón en un hornillo o incluso utilizando un microondas. Ambos métodos son absolutamente válidos, pero mientras que el uso de una caldera doble te dará más control sobre el proceso, el microondas sin duda te ahorrará mucho tiempo. Pero antes, tendrás que cortar la base de jabón en trozos pequeños para facilitar la fusión.

Método 1 - Sobre la estufa: Basta con poner los trozos de jabón al baño maría y calentar suavemente hasta que el agua llegue a ebullición. Mantener el fuego bajo y remover de vez en cuando hasta que los trozos empiecen a derretirse.
Método 2 - En el microondas: Asegúrate de que el recipiente es apto para microondas. Sugerimos una jarra apta para microondas, pero si no está seguro, también puede utilizar otro recipiente apto para microondas. Dependiendo del aparato, puede tardar entre 1 y 1,30 minutos. Lo mejor es empezar primero calentando a máxima potencia durante 1 minuto y luego comprobar el resultado; si no se ha derretido del todo, calentar otros 20 segundos. Siga haciendo esto hasta que la base se vuelva líquida.
Consejo 1: Si quieres eliminar las burbujas de la parte superior del jabón, rocíalo con alcohol y desaparecerán.
Paso 2 - Añadir aceite con fragancia
Ahora es el momento de añadir la fragancia elegida.
Como de costumbre, el reto consiste en añadirlo a la temperatura adecuada para que se mezcle bien en la solución, pero no a una temperatura demasiado alta para que no se disuelva la fragancia. Esto también puede depender de la fragancia específica, así que mejor comprobar primero nuestra guía de aceites aromáticos para puntos de inflamación específicos y medir la temperatura antes de añadirlo a la mezcla.
Lo mismo ocurre con la cantidad de fragancia, algunas serán bastante más fuertes que otras, por lo que puede ser necesario realizar varios intentos antes de conseguir la proporción ideal. En general, sugerimos añadir unos 50 ml a la mezcla y remover bien.
Consejo 2: ¿Por qué no añadir un toque de color o purpurina a las pastillas de jabón? Solo tienes que añadirlos en este punto del proceso (una vez más, asegúrate de que el líquido esté a una temperatura óptima) y seguir removiendo para obtener un color y un dibujo uniformes.
Paso 3 - Verter en el molde y dejar enfriar
Este paso es bastante sencillo, pero requiere precisión, ya que la mezcla tiende a endurecerse muy rápidamente. Asegúrese de llenar los moldes hasta arriba y, a continuación, métalos con cuidado en el frigorífico y deje que las barritas se endurezcan. Como alternativa, si tiene una genial ambiente, puede dejarlos enfriar a temperatura ambiente aunque puede tardar un poco más.
Consejo 3: Cuando enfríe los moldes en el frigorífico, asegúrese de terminar primero los restos de comida, especialmente el queso azul y los pepinillos, ya que de lo contrario el olor del jabón podría volverse bastante "interesante". A menos que sea exactamente la fragancia que busca.
Paso 4 - ¡Saca las barritas y disfruta!
Dependiendo del tamaño total del molde elegido, el proceso de enfriamiento (especialmente a temperatura de frigorífico) no debería durar más de dos horas, momento en el que se pueden desmoldar muy fácilmente y ¡listos para usar!


